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La 24ª edición de la Asamblea General de la Organización Mundial del Turismo, que inicialmente iba a celebrarse en Marrakech, se ha llevado a cabo, entre el 30 de noviembre y el 3 de diciembre, en Madrid, y se ha clausurado con una inolvidable velada ofrecida por Marruecos. Una gran cena en la que el país rindió homenaje a todos los participantes en esta imprescindible cita turística y, al mismo tiempo, tuvo la oportunidad de recordar a todos que Marruecos permanece en el starting block de los grandes destinos turísticos del mundo.
Así, la Asamblea General de la OMT concluyó con una mágica cena organizada por Marruecos en honor de los 500 participantes del evento, así como para los O.T., agentes de viajes y medios presentes. Con ella, Marruecos ha querido poner en valor todas sus bazas a través de su gastronomía, pero también de su música, sus bailes y su arte de vestir. Marruecos es una encrucijada de civilizaciones, una fuente de inspiración, un concentrado de emociones, una paleta de sensaciones, ya sean culturales o religiosas. El país es un rico símbolo de todas las culturas vivas porque pocas naciones han sido capaces de construir un modelo que asuma tan plenamente cada componente de su identidad.
Es precisamente toda esta riqueza la que el Ministerio de Turismo marroquí y la Oficina Nacional Marroquí de Turismo han intentado compartir con los invitados a través de una experiencia que combina una escenografía inmersiva y emocionalmente rica. Esta experiencia fue aún más impactante al tener lugar en un sitio único: La Quinta de Jarama. Un sitio excepcional para un evento excepcional. Todos los invitados aplaudieron el fervor culinario y artístico marroquí. Marruecos recuerda así al mundo su fibra turística y su deseo de permanecer en el radar de los influyentes del turismo mundial.
Marruecos es un país con clara vocación turística. El turismo genera el 7% del PIB marroquí y es una de sus principales fuente de comercio internacional, cubriendo el 20% de las exportaciones del país; un sector que ha registrado un crecimiento continuo durante más de 20 años.
Con 13 millones de turistas internacionales en 2019, Marruecos es uno de los 30 mejores destinos del mundo, e incluso ocupa el primer lugar a escala continental.
Gestión de la pandemia
Sin embargo, Marruecos ha decidido cerrar sus fronteras ante la llegada de la nueva variante del SARS-CoV-2. Con ello, el país está demostrando, una vez más, su voluntad de contener la pandemia y de situar la cuestión sanitaria en lo más alto de sus prioridades. Así pues, Marruecos es un ejemplo en cuanto a la gestión de la pandemia. Hay que recordar que la tasa de vacunación en el país es actualmente de casi el 62%.
Los representantes del país mantienen la esperanza de una recuperación gradual y duradera en cuanto se cumplan las condiciones sanitarias. Los diversos estudios realizados por la Oficina Nacional Marroquí de Turismo demuestran que este país estará a la cabeza de los destinos más codiciados, por todas sus bazas turísticas, pero también por su gestión de la pandemia. El factor salud es ahora un componente primordial en la decisión de viajar.
Apuesta por el mercado español
Una especial atención en previsión de la recuperación se ha puesto en el mercado español, un mercado importante para Marruecos. España es el segundo mercado emisor de turistas hacia Marruecos después de Francia, con más de 2,2 millones de turistas españoles en 2019 (+6% vs. 2018). En concreto, el mercado español representa el 17% de las llegadas de turistas extranjeros a Marruecos.
Además, a partir del 1 de enero de 2022, la Oficina Nacional Marroquí de Turismo contará con un nuevo delegado en Madrid. Un nombramiento que demuestra su voluntad de prestar especial atención al mercado español. En todo caso, la estrategia puesta en marcha tendrá como objetivo revitalizar la actividad turística ampliando los márgenes de progresión de las distintas regiones de España y mantener la posición de Marruecos como primer destino de los españoles fuera de Europa.