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Navidad es una de las mejores épocas del año para descubrir Lisboa. El olor de las castañas asadas, los villancicos, las luces callejeras y los mercadillos temáticos inundan la capital portuguesa, haciendo de ella un destino aún más especial; el lugar perfecto para una escapada en pareja, con amigos o con los más pequeños de la familia.
El clima suave que tiene Lisboa durante todo el año es perfecto para pasear y admirar la belleza de todas las luces y adornos navideños que decoran las principales calles, como la Rua Augusta, la Avenida da Liberdade o la Rua Garret. En la Plaza del Comercio luce espectacular, con 30 metros de altura, un árbol de bombillas LED, iluminando el lugar más emblemático de la ciudad; mientras tanto, en la Plaza Luís de Camões se ubica una gran bola del mundo, a cuyo interior se puede pasar.
En Navidad, de imperdible visita son los múltiples mercadillos que se instalan en diferentes puntos de la capital lusa, lugares imprescindibles para adquirir todo tipo de productos típicos y degustar la mejor comida tradicional. El más grande de ellos se encuentra en la plaza de toros de Campo Pequeño, con más de 100 expositores que venden productos 100% portugueses.
Además, hasta el 2 de enero, el Parque Eduardo VII acoge Wonderland, un gran espacio abierto (de entrada libre) con distintas atracciones, pista de hielo, una noria con vistas de 360º, una aldea navideña y puestos de comida. Un lugar lleno de magia, diversión, comida, música, buenos momentos y varias actividades perfectas para que las familias disfruten de la Navidad en Lisboa.
En el barrio de Alvalade se celebra todos los meses el Hype Market, pero en Navidad tiene un carácter especial, con más de 50 expositores con artículos dedicados a la moda. Otro de los que no se pueden dejar de visitar es el de Get Zen que acoge el Museo Palacio Pimenta, perfecto para ir en familia, ya que realizan actividades para niños y ofrece opciones de compra de artesanía, alimentos y productos ecológicos.
Cerca de Campo de las Naciones está Natalis, un universo mágico para todos los públicos que alberga en su interior varios espacios: de sostenibilidad, de juegos, de gastronomía, de tradiciones del mundo y de chocolates.
Y para una experiencia completa, nada mejor que degustar el dulce típico de la época, el Bolo Rei, un roscón de Reyes hecho a base de pasas y frutos secos.
Desde luego, en esta época tan especial, la ciudad sigue ofreciendo su interminable lista de atractivos y monumentos, desde lugares tan significativos como el Arco de la Rua Augusta o el Castillo de San Jorge hasta museos de clase mundial, como el Museo Nacional de Arte Contemporáneo (Museo de Chiado) o la innovadora experiencia interactiva que ofrece el Lisboa Story Centre en pleno Terreiro do Paço, pasando por lugares tan emblemáticos como el Monasterio de los Jerónimos y la Torre de Belém, ambos declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, entre muchos otros puntos de interés que hacen de la ciudad un destino apasionante.
La gastronomía, el fado, los paseos por los barrios históricos de la ciudad –del Barrio Alto a la Mouraria, de Chiado a Alfama…–, los cruceros fluviales por el estuario del Tajo, los cafés, los alojamientos con encanto, los miradores… Innumerables teselas que terminan de dar forma a un mosaico impresionante llamado Lisboa.
A tiro de piedra: visitas imprescindibles
Fuera de la ciudad de Lisboa, el pueblo pesquero de Cascais también instala un mercado de Navidad. Con el lema “Viaje a la magia de la Navidad”, este espacio cuenta con atracciones más que interesantes, como la casa de Papá Noel, un bosque encantado con renos de verdad, un globo de nieve, un enorme carrusel, una pista de patinaje sobre hielo y una casa del árbol.
Ericeira, Mafra, Sintra, Arrábida… el rico entorno de la ciudad hace de Lisboa el punto de partida perfecto para descubrir todo tipo de tesoros, desde exuberantes paisajes naturales hasta tesoros reconocidos como Patrimonio Mundial, también bañados por la magia de la temporada navideña.
En todo caso, la capital portuguesa está más que preparada para acoger de nuevo a los turistas y celebrar Navidad de la forma más especial.
Fuente: Munka Comunicación & Marketing